Hace tiempo leí en un foro que alguien proponía usar bridas de plástico como cadenas de nieve para la bici.
Esa idea me fascinó!
La idea de combinar Mountain Bike eléctrica y nieve de forma tan simple era demasiada tentadora para no probarla.
Investigando en internet, encontré un vídeo muy bien realizado que explicaba cómo hacerlo, pero que acababa concluyendo que el montaje con bridas de plástico no aportaba diferencia en la tracción… con la consecuente decepción por mi parte.
Sin embargo, la tentación era demasiado grande como para abandonar, así que decidí investigarlo por mi cuenta.
Encontré la oportunidad hace unas semanas cuando unos amigos me propusieron pasar un fin de semana en la nieve y no dudé en plantarme en la estación de esquí vestido con el culote y arrastrando mi Mountain Bike.
Al final rodé 20 km. en una pista de ski de fondo en la Vall d’Aran: del Pla de Beret al refugio de Montgarri.
El resultado
Muy muy aconsejable!
La combinación de nieve, montaña y una MTB eléctrica, con el plus de tracción que eso supone, es extremadamente divertido y supone sensaciones nuevas.
Si vives en una zona cercana a la nieve y tienes más de una oportunidad al año de rodar sobre nieve puedes optar por unas cubiertas especiales para nieve como las Schwalbe Ice Piker o con un inventillo como este, si el presupuesto no es tu problema.
Pero si como yo, pisas la nieve una o dos veces al año, te recomiendo que subas con tu bici y que pruebes con las bridas, porqué sí, ¡funcionan!
Para mí, el error en el vídeo estaba en la idea de que tan solo con la superficie de la brida sería suficiente para garantizar la tracción.
Lo que hay que conseguir es que el neumático gane agarre con la brida, aumentando su resistencia a la tracción, así que hice diversas combinaciones hasta que encontré la que mejor funcionaba.
¿Y cuál es?
He intentado reproducir el montaje por si alguien más se anima a probarlo.
Las bridas de plástico
Es importante comprar unas bridas grandes. En mi caso, las más grandes que encontré en una ferretería, de 7,6 mm de ancho y el largo suficiente para abrazar de forma holgada rueda y llanta, en mi caso de 45 cm.
Se puede optar por otros tamaños, pero personalmente aconsejo que sean lo más anchas posibles. Lo que buscamos es que su cabezal sea grande pues su uso es como si fuera un taco.
El montaje
Con las diversas pruebas acabé con un montaje curioso pero que funcionaba.
Usando el cabezal de la brida para crear un taco, y cortando la brida con cierto angulo para crear una especie de clavo, conseguí un neumático que prometía.
Sin embargo, al rodar unos pocos kilómetros, los cabezales que había situado en la linea de rodadura central,se acabaron rompiendo al ir los pisando.
Decidí situarlos en los laterales de la linea de rodadura, de manera que me daban tracción cuando la nieve era más blanda, sin pisar el cabezal continuamente y romperlo cuando la nieve era más dura.
Para la linea de rodadura se me ocurrió colocar una brida retorcida que actuara como una pequeña pala en la rueda.
Este detalle fue la clave, de este modo las bridas retorcidas me daban tracción, mientras las del cabezal me proporcionaban estabilidad.
¿Os animáis? Si es así, no dudéis en comentarlo, es toda una experiencia.
Happy Trails!
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